¿QUÉ HICIERON LOS PADRES QUE TUVIERON ÉXITO EN LA RECUPERACIÓN DE SUS HIJOS ALIENADOS?
La experiencia de estar afrontando una
situación de alienación con mis hijos durante varios años, sabiendo lo
que es perder a uno de ellos y estar a punto de perder
a otro, me facilita poder enumerar –sin pretender ser exhaustivo-
una serie de claves que nos ayuden a tener esperanza en recuperar a un
hijo alienado. Ninguna de estas claves es por sí misma
suficiente para lograr el objetivo de reencontrarnos con un hijo
alienado por la falsedad y la manipulación, pero todas ellas juntas
pueden suponer una receta razonable, exitosa y de alta
probabilidad para conseguirlo.
1. El primer principio “necesario” es persistir en la lucha para encontrarse con nuestros hijos. Aquellos padres que lo consiguieron “Nunca”
abandonaron la lucha pese a la lentitud de la justicia, al sentir
impotencia y a tener momentos de desánimo. Cuando todo parecía perdido,
seguían creyendo un mañana
con su hijo, en otra oportunidad para vencer las dificultades.
Cuando las puertas se cerraban, abrían ventanas. Cuando la Justicia iba
en contra de sus aspiraciones, esperaban otro momento para
demandarla otra vez.
2. Los padres que luchan por sus hijos, requieren además tener un dominio de sí mismos.
La mitad de la posibilidades que vamos a disponer para
reencontrarnos con un hijo falsamente alienado es controlar el
desasosiego y la injusticia. No cometer errores personales o judiciales
fruto de la impaciencia y el dolor. Sabemos que es
tremendamente complejo tener esa paciencia requerida con las
progenitoras que nos apartan de nuestros hijos. Hemos tenido que
aguantar mentiras, denuncias falsas, traiciones, discriminación ante
profesionales y ante la misma justicia. Uno a veces lo tiraría todo
por la borda, o sencillamente huiría, o ¡quién sabe si haría algo más
equivocado!. Pero en ese instante de dudas es
precisamente el momento donde un padre debe de “Controlar sus
emociones y dominar su indignación”.
3. Ser rectos con la ley y los
imperativos judiciales, y así mismo ser coherentes con los valores
morales de atención de nuestros hijos. No es fácil
ser consecuente con este axioma, pues sabemos que incluso las
progenitoras de nuestros hijos han jugado con el chantaje emocional o
económico para permitirnos (o no) estar con ellos. Los
requerimientos judiciales muchas veces no son ecuánimes. Pero en
esas circunstancias es mucho más probable seguir luchando por nuestros
hijos si “cumplimos con las obligaciones morales y legales
(pensión, educación, salud, etc.) establecidas para poder
relacionarnos con nuestros hijos
4. Los abogados son de una importancia relevante en este proceso. Los padres que lucharon, también tuvieron abogados que conocían el fenómeno de
alienación y lucharon tenazmente, sin desasosiego, pero con persistencia.
5. Realizar informes periciales médicos y psicológicos que a la larga localicen detalles de que un hijo puede necesitar un padre.
No es en sí mismo
un requisito imprescindible, pero si puede ser muy interesante.
Muchos padres luchadores han contado con informes periciales
médico-legales (oficiales o de parte) que pusieron en evidencia el
proceso de alienación.
6. Tener una estrategia de acción durante todo el proceso de recuperación de nuestros hijos. Los padres que lucharon supieron trazar un plan de
acción a corto, medio y largo plazo y han mostrado ser razonables, combativos y prudentes.
7. Tener un plan de registro de todo lo acontecido.
Ir registrando todo lo sucedido para utilizarlo tanto a nivel personal
como en futuros juicios y
en un posible tratamiento psicoterapéutico. Tener un mapa en la
mente de todo lo que sucede en la relación, o falta de relación, con
nuestros hijos.
8. Concurrir, si las hay, a las “visitas” impuestas a pesar de que los hijos no fueran llevados o enviados por sus progenitoras.
9. La lucha la han programado desde los valores del amor y el apoyo. Han sido hombres decentes, con principios y convicciones sólidas, que actuaron
motivados por querer lo mejor para sus hijos
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