Son muchas las razones para celebrar un día del hombre, porque además de lo que aportaron, aportan y siguen aportando a la sociedad, a la familia y a las relaciones sociales, son en la actualidad un colectivo discriminado por razón de sexo y son muchas las brechas respecto a las mujeres que además de ser ocultadas, ni siquiera tienen visos de querer ser resueltas por el poder dominante del Feminismo. Entre otras razones por estas:
—Porque, de las 40 causas de muerte más comunes, 33 afectan más a los hombres, incluyendo enfermedades respiratorias, enfermedad isquémica del corazón, Ictus, algunos tipos de cáncer como los de tráquea, pulmones, bronquios, próstata, estómago, esófago, hígado..
—La mayoría de las víctimas de homicidio, asesinato y agresiones violentas son hombres (más del 80%).
—También son hombres la mayoría de los suicidas, un acto de violencia que mata más que los accidentes de tráfico, y que sacrifica en un 75% de los casos a los hombres como víctimas.
—Porque, a pesar del discurso que los dibuja como una «clase dominante y privilegiada», los trabajos más peligrosos y duros son desarrollados en su mayoría por hombres. Se olvidan de las Brechas Suelo, los más arriesgados trabajos física y psicológicamente.
—Los hombres representan en torno a un 97% de los fallecidos anualmente en accidentes laborales.
—Porque, en España, entre el 75 y el 85% de las personas sin hogar son hombres.
—Porque las cincuncisiones (existen diferentes tipos) causan más muertes que la mutilación genital femenina, pero esto se minusvalora e incluso ridiculiza, comparándolas con una operación de fimosis.
—Porque se invisibilizan la esclavitud y la trata de hombres, las violaciones y torturas sexuales de guerra hacia hombres.
—Porque los niños varones también son víctimas de las mafias, de proxenetas, de todo tipo de explotaciones, son usados como niños soldado, como luchadores en espectáculos callejeros, se les dedica a la mendicidad.
—Porque las cifras de niños sin acceso a escolarización son similares a las de niñas en esa situación, aunque a ellos se les ignora. No existen campañas específicas para concienciar sobre los problemas masculinos, y solo con mencionarlos, se desatan furiosos ataques y burlas hacia quienes intentamos visibilizarlos.
—Porque, incluso en España, los niños presentan mayor tasa de abandono escolar, los chicos son minoría en la Universidad, y en todas las carreras a excepción de las STEM (científicas y tecnológicas), pero las campañas y propuestas de apoyo que se presentan son para las niñas y las mujeres: se busca facilitarles las matemáticas, motivarlas a escoger carreras científicas.
—Porque se reclama paridad solo en ocupaciones y puestos deseados. Se exige paridad en puestos directivos, se presiona a las empresas para que contraten mujeres... Pero no se hace lo mismo en ocupaciones «feminizadas» (ni siquiera en los servicios públicos) como la enfermería, el trabajo social, la educación infantil.
—Porque en España existen leyes y medidas discriminatorias por sexo, discriminación en el acceso a recursos, ayudas, formación, empleo... en contra de lo que dice nuestra Constitución. Todas ellas son medidas discriminatorias contra el varón que, como obviamente benefician a la mujer, son denominadas «discriminación positiva».
—Por la existencia de medidas penales de “autor”, es decir, condenas específicas para hombres mucho más elevadas que si el mismo delito lo cometiese una mujer, lo cual influye además en que los hombres se ven alejados de sus hijos con solo tener denuncias de violencia de la mal llamada violencia de género, aunque sean inocentes por denuncia falsa.
—Porque los hombres no solo carecen de derechos reproductivos; tampoco se les ofrece gratuitamente (a los niños) la vacuna frente al VPH, a pesar de que lleva años poniéndose a las niñas, y de que los pediatras reclaman que se les ponga a los niños también.
—...
La lista de discriminaciones y problemas sufridos principalmente por los hombres es inmensa, y podríamos seguir hasta aburrirnos.
Por cada problema femenino, hay un problema masculino. Con un agravante: de ellos, además, se espera que sean fuertes, valientes, resolutivos, competitivos, sacrificados.
Del mismo modo que una buena madre debe entregarse a sus hijos, se espera que un buen hombre se entregue a la sociedad. Incluso aquellas que hablan de «igualdad» y «equidad» esperan que sean ellos los que se jueguen la vida en minas y pozos, guerras, durante meses en medio del océano, o en la carretera, en carreteras asfaltadas por hombres.
Nuestras sociedades han avanzado y lo siguen haciendo también gracias a los hombres, y a las cualidades masculinas que hoy intentan denigrarse, tachándolas de «tóxicas».
El Día del Hombre no solo es necesario, sino que es lo justo y merecido, para visibilizar los problemas masculinos, pero también para reconocer las virtudes e importancia de quienes representan la mitad de nuestra sociedad, de nuestras comunidades, de nuestras familias.
Ninguno habríamos nacido de no ser por una mujer, pero esto tampoco habría sido posible sin un hombre.
Feliz día, papás, hijos, hermanos, amigos... HOMBRES, porque también sois valiosos.
Alma María.
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