Voto en conciencia por la familia, la libertad no condicionada por ninguna ideología o grupos de presión, y por la igualdad ante la ley, sin ningún tipo de discriminación, sea positiva o negativa.
A quién y porqué votar (o no votar o hacerlo de forma irregular) es una decisión personalísima, y dicen los entendidos que uno de los ejercicios de libertad democrática más valiosos.
Sinceramente, pongo en tela de juicio la afirmación de que se trate de un ejercicio libre en términos absolutos, y más dados los grandes condicionantes que suponen los recursos educativos e informativos que dispone cada uno de nosotros, pero sobre todo la nada despreciable capacidad de manipulación de los Medios de Comunicación. Y hablo de manipulación en el amplio sentido, no sólo el negativo, sino la de elegir y formar opiniones filtrando los mensajes.
Voy a votar, y lo hago en conciencia. Con las dudas lógicas de que ningún partido representa mis convicciones de una forma integral. Ni siquiera voy a votar al programa político que más se aproxima a mi modo de entender la política y la vida.
Voy a votar en función de lo que consideró más esencial, no sólo para mi, sino para esta sociedad tan fragmentada y anestesiada por ideologías varias, y en especial la del Feminismo que tiene el mayor grado de control y poder social jamás vistos en la Historia. Me alejo de ese poder y sus ramificaciones.
Y los criterios para ejercer mi derecho a votar van a ser la defensa de la "Familia Nuclear", "la Libertad Personal" y la "Igualdad ante la Ley y de Oportunidades". Sencillos, pero profundos valores.
Porque creo que sin un cuidado y respeto a la Familia, que son los más ancestrales e íntimos vínculos, sin Libertad Personal no condicionada por los grupos de presión en el poder, y sin que todas las personas seamos Iguales ante la Ley, todos los demás criterios macroestructurales como la Economía, Salud, Trabajo, Cultura y Educación, no sirven de nada.
Por eso voto en conciencia pensando en esos criterios. Dejo de lado factores ideológicos que nunca me demostraron valer la pena en esta España nuestra, y apuesto por quienes sin miedo han dicho SI A LA FAMILIA, SI A LA LIBERTAD y SI A LA IGUALDAD ANTE LA LEY.
Va por vosotros hijos míos. Vosotros me habéis hecho pensar en mi decisión y mi voto. Y hablo de los hijos que están a mi lado, y de quienes me alejaron por alienación.
Sed libres amigos. Y suerte.
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